Domus Greco
Greco supone la receta más original de Domus y de concepción más autoral del maestro cervecero. Inspirada en la figura artística de un genio, esta cerveza de gama alta combina ingredientes de Oriente como la canela, los lúpulos alemanes e ingleses de Occidente, el limón del Mediterráneo y la almendra y azafrán de la ciudad de Toledo. Elaborada en conmemoración del IV Centenario de la muerte de El Greco, es hoy en día la Domus más exclusiva.
IPA
Arriaca IPA es una cerveza de fermentación alta con marcado carácter a lúpulo. Su complejidad, notable cuerpo y cremosidad crean una cerveza especial para ser degustada con los cinco sentidos.
Aspecto: En vaso presenta un color anaranjado fuerte tirando a rojizo, con una corona de espuma cremosa y de buena retención.
Aroma: En nariz destacan los aromas cítricos, sobre todo a pomelo y mandarina, notas herbáceas, florales y matices afrutados. Todos estos matices dejan paso al aroma dulce de las maltas caramelizadas.
Sabor: En boca presenta un amargor medio que se disipa rápidamente dejando paso al cítrico, al pino y al caramelo y galleta propio del grano utilizado. Final balanceado hacia la malta y sin amargor astringente.
Maridaje: Carnes rojas, asados, caza, guisos contundentes, quesos fuertes, patés…
Arriaca IPA ha obtenido el Premio ABC a la mejor IPA española 2016 en Madrid, medalla de plata en el Dublin Craft Beer Cup 2016 y medalla de bronce en el World Beer Idol 2016 en Praga.
Rubia
Es refrescante y no te deja indeferente. Ligeramente dorada, está coronada por una espuma estable, y ha sido concebida para disfrutar en cualquier ocasión.
Es una cerveza de fermentación baja (Lager) sin filtrar, con una segunda fermentación en botella. Concebida para ser degustada en cualquier tipo de ocasión, es refrescante y ligera, pero no te dejará indiferente.
Puedes beberla directamente de la botella, pero si quieres disfrutarla al máximo a la vista, olfato y al gusto, es conveniente dejarla reposar verticalmente antes de servirla fría muy despacio en el vaso y procurando dejar el poso en la botella para que no se enturbie.
Su color es amarillo, ligeramente dorado, y está coronada por una espuma estable, adherente al vaso.
En el aroma predomina el grano de nuestra tierra, ya que un gran porcentaje de las maltas utilizadas proviene de Castilla-La Mancha. También encontramos aromas frutales y a pan fermentado, aportados por la levadura. El lupulado es ligero en nariz, aunque se pueden percibir los toques herbáceos de lúpulos alemanes y checos.
A pesar de tener una entrada ligera, posee volumen, cuerpo, lo justo para no acaparar todas nuestras papilas, dejando una tenue persistencia, el compañero perfecto para maridar con cualquier comida o simplemente de tapeo. El carbónico es moderado, agradable al paladar.