Amstel Oro
Color ámbar profundo, delicado aroma a malta, delicioso sabor tostado.
Desde su elaboración en 1956, si existe una cerveza que brilla por sí misma, esa es la Oro. Menos mal que al probarla cae bien, y con el tiempo hasta se hace querer. Sin duda, tiene todos los ingredientes para ser la más pretenciosa de nuestra gama, pero prefiere ser prudente. Dicen que no todo lo que brilla es oro. Estamos de acuerdo, es Amstel Oro.