Amstel Oro
Color ámbar profundo, delicado aroma a malta, delicioso sabor tostado.
Desde su elaboración en 1956, si existe una cerveza que brilla por sí misma, esa es la Oro. Menos mal que al probarla cae bien, y con el tiempo hasta se hace querer. Sin duda, tiene todos los ingredientes para ser la más pretenciosa de nuestra gama, pero prefiere ser prudente. Dicen que no todo lo que brilla es oro. Estamos de acuerdo, es Amstel Oro.
Grimbergen Optimo Bruno
Esta cerveza originalmente se elaboraba sólo en tiempo de pascua.
Sugestiva nariz con complejo conjunto de flores, caramelo tostado, cerezas maduras y yodo.
Textura densa y amplia en boca. Paladar muy seco, afrutado, intenso y fuerte, obtenido por su doble fermentación.
Oro Bilbao
En 1912, unos cuantos bilbaínos decidieron que Bilbao necesitaba una cerveza de calidad, a la altura de lo que significa ser del Botxo. La Cervecera del Norte creó la cerveza Oro, con los mejores ingredientes y una elaboración minuciosa. Una cerveza nacida en Basurto y premiada en el mundo. Una cerveza con un sabor genuino, presente en la historia de la Villa. Oro fue el sabor del primer viaje en trolebús, de los paseos en Txinbito. Oro era el trago tras una larga jornada en el puerto, el momento de desconexión al salir de los astilleros. Saciaba la sed en la grada del antiguo campo cuando éste era nuevo. Oro estaba presente al salir del Arriaga y al entrar la noche en Jardines de Albia. Era el trago tras una despedida en La Naja, y es que en Bilbao, la cerveza sabía a oro, de toda la vida.