Esta Strong Ale belga es tan rica, tan dulce y tan deliciosa, que no dudaríamos en llamarla pura lujuria dentro de una botella. Durante la elaboración de esta cerveza el estado de ánimo general se volvió algo sensual, si no directamente erótico! Esta cerveza es tan lujuriosa que no podemos responder ante las consecuencias si le sirves esto a tu novia durante una cena con velas.
No estamos orgullosos de ser pecadores, pero al menos estamos abiertos al respecto...
De color castaño oscuro. Sabor a malta fuerte, aromas tostados con chocolate, ron marrón, y especias
Sabor ligeramente dulce. Reforzada por acentos de malta tostada, cacao, fruta madura y especias oscuras.