Milana Tostada
Cerveza de alta fermentación, estilo AMBER, elaborada con tres variedades de malta y dos de lúpulo. Sin filtrar ni pasteurizar. Producto natural que puede contener sedimentos. Recomendamos no servirlos.
Maridaje: Las agradables sensaciones de cremosidad en paladar así como
su aroma herbal hacen que Milana Tostada resulte ideal para acompañar platos de carnes suaves y poco condimentadas, pescados azules de gran cuerpo y volumen, mariscos, verduras amargas y ácidas, así como diferentes tipos de queso: tierno (tipo Burgos), tortas del casar, gouda, añejos, parmesanos, etc.
Otra elaboración de Dèria Cerveses
Tesela Tostada Roble es una cerveza de alta fermentación (Ale), sin conservantes ni aditivos de tipo artificial, 100% malta de cebada, sin filtrar ni pasteurizar. La utilización de virutas de roble francés durante su maduración en depósitos de acero inoxidable le aporta un carácter especial. Los sedimentos son propios de su carbonatación natural. Recomendamos servir con cuidado la cerveza dejando los posos en la botella.
La Cata
Cerveza de bonito color ámbar-topacio o caramelo rubio, con una corona muy persistente a pesar del tiempo que pueda permanecer en la copa.
Al acercárnosla a la nariz, nos vienen en inicio aromas de lúpulo y maltas de calidad, recuerdos de frutos secos propios de las maltas como son la nuez tostada, incluso garrapiñada, así como de maderas varias mezcladas con caramelo tostado: brezo, regaliz de palo, torrefactos suaves, incluso polen o miel tostada.
En boca es donde se desarrolla en plenitud y “se abre” en todo su esplendor: carbónico suave e integrado es lo primero que percibe el paladar. A continuación la cerveza se va desarrollando por todas las papilas gustativas con una densidad media y alcohol muy moderado, y dejando marcado de nuevo los recuerdos del tostado de la madera: caramelo o miel tostada, frutas de hueso escarchadas, dátil, ciruela pasa, polen; para dejar una persistencia final muy pronunciada, con sensaciones tánicas propias de otras bebidas, y que de nuevo vuelven a recordarnos su elaboración con madera de roble.
En fin, una cerveza para disfrutar con tranquilidad, sólo o en compañía de los amigos, sola o para acompañar una buena mesa con platos de carnes blancas a la brasa, guisos tradicionales o escabeches ligeros, o incluso platos más modernos y sugerentes como una buena ventresca ahumada o un buen atún teriyaki.
Cata realizada por Diego Muñoz, sumiller del restaurante "La Lobita" de Navaleno (Soria).