Domus Take Five
Imperial Stout
Elaborada con y para la cervecería “Lúpulo bar” de Toledo, uno de los primeros clientes de Domus, juega con los aromas y sabores hivernales de las frutas pasas y el cuerpo denso de la stout para obtener una cerveza que se presta a saborearla pacientemente.
Intensidad en sabor, fineza olfativa y color. Destaca su aroma a grano. Aunque se deja acompañar a la perfección por quesos, carnes o chacinas, ha nacido para brillar por sí misma.
Cerveza de fermentación alta (Ale) sin filtrar, con una segunda fermentación en botella. Posee sabor, aroma y color intensos.
Aunque se deja acompañar a la perfección por quesos, carnes o chacinas, ha nacido para brillar por sí misma. Si quieres disfrutarla al máximo a la vista, al olfato y al gusto, es conveniente dejarla reposar verticalmente antes de servirla fría, muy despacio, en el vaso, procurando dejar el poso en la botella para que no se enturbie. Si la bebes en vaso y has seguido las indicaciones anteriores, lo primero que te llamará la atención es su color rojo anaranjado, transparente, obtenido por el aporte de gran cantidad de maltas especiales, aunque su corazón de malta sigue siendo manchego por el aporte de malta de la región. Está coronada por una espuma cremosa.
En nariz predomina un olor intenso a grano, aunque encontramos notas de caramelo, café y, si seguimos inspirando, los aromas típicos de la levadura. Los lúpulos alemán y checo aportan toques ligeros herbáceos y florales.
Es abocada la entrada en boca, dulce, redonda; te llena la boca, pero con una persistencia media que te invita a seguir disfrutándola. El carbónico es más bien moderado y está bien integrado. El amargor, sin ser excesivo, se hace notar.