Se trata de una cerveza que en apariencia es fiel al estilo belga (clara y ligeramente turbia), con una espuma muy blanca, pero que cuando nos acercamos a ella nos sorprende con aromas que no son habituales en este estilo; se trata del tomillo y del
que toman un claro protagonismo en detrimento de los más habituales a semilla de cilantro y piel de naranja. Cuando damos un trago resulta una cerveza muy ligera, donde inicialmente notamos el sabor a trigo (pan) y a tomillo, que podrá ser más acentuado si la temperatura de la cerveza es más alta. Es muy bebible y muy refrescante, con un punto ácido al final con ciertas notas a cilantro y naranja. Su carbonatación es más ligera que lo habitual en el estilo y se puede añadir el poso una vez removido para aumentar la persistencia de la espuma..
En cuanto a los ingredientes destacar que usamos trigo y malta de cebada manchegos, a parte del muy manchego tomillo, es por tanto una auténtica cerveza manchega, casi Km 0. Less