Un nombre sugerente para una cerveza sugerente. Nuestra primera cerveza negra no podía ser clásica, así que nos decantamos por una Milk Stout. Potente en sabores torrefactos, posee un dulzor residual de la lactosa y el curioso toque del regaliz de palo natural.
Espuma compuesta de burbuja gruesa, que perdura poco hasta solo dejar una leve corona sobre la cerveza.
Color negro azabache, con mucho cuerpo. Una cerveza potente en sabor y que sin embargo se bebe fácil y se disfruta degustando una vez tras otra.
Levadura americana y lúpulo fuggles aportan su granito de arena para ese torrente de sabor en boca.
2ª Cata tras 3 meses de maduración:
La primera cata, con poco tiempo de maduración, nos dio aromas y sabores torrefactos. El tostado dominaba de cabo a rabo los aromas y sabores, convirtiéndola en una cerveza muy potente pero quizá aburrida.
Este fin de semana hemos abierto otra botella tras 3 meses de maduración y el resultado ha sido sorprendente. Creo que nunca habíamos apreciado un cambio tan marcado por el hecho de madurar la cerveza, este caso ha sido espectacular.
Espuma abundante, cosa que echábamos en falta en la primera cata. Sin embargo, perdura poco hasta quedarse en una corona sobre la cerveza. No nos preocupa, lo preocupante era la falta de espuma inicial, que estéticamente nos disgustaba. SOLUCIONADO CON LA MADURACIÓN.
Aroma a frutos rojos. Sorprendente. Hemos notado la mora. Nos ha recordado a la Oyster Stout de Martons. El torrefacto solo al final , algo de café. Aroma riquisimo.
Y el sabor.... totalmente diferente. Ya no domina el torrefacto, el amargor totalmente compensado con la maltosidad y el tostado. Fácil fácil de beber.
Karkadé - Unexpected belgian beer
Belgian strong ale sobre base de receta de Belgian Golden Strong Ale aromatizada con pétalos de karkade egipcio, cilantro y piel de naranja.
Tiene 8% y es muy fácil de beber entra muy dulce que va transformando en amargor a medida que pasa por el paladar con el carbónico justo para equilibrar esta gran cerveza.
Te transportará a los tiempos faraonicos.
En Egipto es tradición recibir a los invitados con una bebida de color rosácea, fría o caliente, llamada Karkadé. Por eso es conocida como “la bebida de la bienvenida”.
El Hibisco de Sabdariffa (Roselle o Karkadé) es una planta que pertenece a la familia de las Malváceas y es muy popular en algunos países de Medio-Oriente sobre todo en Egipto.
Un viaje a aquel país es el origen de esta cerveza tan sorprendente, una manera de incorporar esa maravillosa cultura a nuestra cerveza. Nos encontramos ante una cerveza de 8º de alcohol, con matices y fondo Belga, muy fácil de beber y muy compleja. Aroma a vino blanco y flores impacta en un primer momento en la nariz, ya demostrando que nos encontramos ante algo diferente.
De entrada muy dulce en boca, el dulzor se transforma en amargor ligero a medida que se suceden los tragos. En el fondo continúan las flores, quizá miel, quizá cítricos, quien sabe.Espuma abundante en inicio, desaparece hasta dejar una leve capa o corona sobre la copa de cáliz.
A medida que se va templando van pronunciándose mas los matices y se incrementa la complejidad de la cerveza.
Recomendamos maridar Karkadé con quesos curados, fuertes, y frutos secos. Perfecta como cerveza de sobremesa o para acompañar los momentos de lectura o de reflexión.
Versión o recuperación de la receta homebrew Drunken Monk - Karkadé Strong Ale
Drunken Bros Black Maiden
En esta ocasión os presentamos una Imperial Mocha Stout de 10,3º de alcohol, elaborada con avena negra, dos tipos de cacao puro y café, ambos provenientes del comercio justo.
Además hemos utilizado un mix de maderas de roble procedentes de diferentes barricas (Oporto, Lagavulin, Bourbon y Cognac) y en diferentes proporciones, para añadir mas complejidad si cabe a la cerveza. Hemos bautizado esta técnica como "Mixed Oak Age".
Posee un aroma muy intenso, mezcla de café, chocolate, caramelo, algo de vainilla y licores varios. Ya el aroma sirve de presentación clara de lo que nos vamos a encontrar en el paladar tras dar el primer trago.
En boca se presenta densa y cremosa, con un paso sedoso por el paladar, con recuerdos intensos a chocolate, café y caramelo para dar paso al amargor del chocolate negro y la combinación de licores, Oporto, Whisky, Cognac.... Con un retrogusto largo, seco y torrefacto. Posee matices licorosos pero el alcohol se encuentra bien integrado y no interfiere en el trago.
Toda una copa para degustar tranquilamente.