Resultado de la colaboración entre Weihenstephan (la cervecera más antigua del mundo) y la norteamericana Samuel Adams. Con un sabor único, seco y fuerte. Tiene cierto gusto de acidez y sequedad, aspera
paladar, que sin embargo se equilibra con un cuerpo de malta suave. Innovadora, clara y cristalina, con lúpulos nobles de Baviera que aportan aromas cítricos. Podría parecerte un cava o vino espumoso, pero al degustarla aparecerá la textura y sabor de buena cerveza, el amargor y los lúpulos que la hacen inconfundible. Less