Sabor maltoso y agradable. Tiene muy buen cuerpo para ser una cerveza de invierno. Quizás le falta un poco de aroma. La visita guiada en el local és un buen plan, los propietarios muy cercanos y muy bien explicado todo. Sin duda, repetiré
Precioso almacén modernista abierto los domingos por la mañana. Poco gas y sabor persistente, como a mí me gusta. En mí opinión, la mejor de las tres.
Le falta carbonatación, como a su hermana pequeña l'Alè de Drac. Por lo demás es muy correcta, un sabor muy redondo, tirando a maltoso.