La Coruja Craft Beer

La enorme pasión por la cerveza es el punto de partida de La Coruja. Degustar este líquido milenario en sus variantes ha sido nuestro gran hobbie desde hace años. En esta trayectoria hemos podido ver y comprobar que no solo el hecho de beberlo es un placer, sino que lleva implícito risas, alegrías, recuerdos, anécdotas, viajes… vidas de las personas que tienes alrededor y que comparten abiertamente todo esto.
La cerveza siempre ha sido una fuente de salud física y anímica, además de ser una herencia que nos muestra pequeñas pinceladas de quiénes somos y de dónde venimos.
Bajo el lema “Compartir es Beer Beer”, sale a la luz La Coruja como un proyecto ilusionante y emocionante, una aventura que queremos transmitir.
Tras adquirir experiencia en talleres artesanos de maestros cerveceros desde 2012, y recibir los mejores consejos de profesionales en el sector, en 2016 presentamos La Coruja.
Llevar a cabo este proyecto no ha sido tarea sencilla, y por este motivo nacemos como nómadas con la decisión de apostar por una primera cerveza rubia estilo Belgian White, fácil a la hora de beberla y entenderla. Realizando una gran selección de las mejores maltas alemanas, un experimentado tratamiento del lúpulo y la elección de las levaduras líquidas adecuadas, da como resultado que nuestra cerveza sea refrescante, de aromas cítricos, sin filtrar ni pasteurizar.
La Coruja debe su nombre a un ave rapaz nocturna, denominada así en portugués, y conocida por nosotros como lechuza. Dicha palabra en ocasiones se utiliza para describir viveza, amplitud en la visión de las cosas…
Estas características hicieron que nos decantáramos por este animal como símbolo, ya que nuestra filosofía es mantener los métodos artesanos para elaborar un producto de calidad, competitivo, que sea capaz de trasmitir esas ganas de vivir en momentos especiales, únicos e irrepetibles.