Cerveza negra con reflejos rojizos, rica y cremosa, aroma de malta y notas de café tostado. Servir muy fría para acompañar cualquier plato
Bock Damm
Bock-Damm es el resultado de la combinación de tres tipos de maltas; maltas torrefactas, maltas caramelizadas y maltas Pilsen.
Maltas torrefactas
Se obtienen tostando los granos secos de malta entre 200º y 220º C. Son las responsables de su color característico y aportan olor y sabor a tostado, así como aromas de cacao y café.
Maltas caramelizadas
Se consiguen tostando la malta verde entre 60º y 75º, provocando la creación de azúcares en el centro del grano. Estos granos se tuestan de nuevo entre 150º y 180º caramelizando los azúcares y aportando notas que recuerdan a caramelo, pasas y miel.
Maltas Pilsen
Son las habituales en las cervezas lager, las que aportan los azúcares para la fermentación y la dotan de un sabor a cereal.
La combinación de estas tres maltas y una cuidadosa selección de ingredientes, 100% naturales, dan como resultado una cerveza negra con mucho cuerpo, notas de sabores tostados y con el intenso color de las cervezas negras tipo Múnich.